Este tipo de trastorno se ha vuelto cada vez más común entre los mexicanos. En el portal psico.mx, se reciben cada vez más solicitudes para tratar problemas de ansiedad que, en muchas ocasiones, son los desencadenantes de los ataques de pánico.
Con un 17,79%, el Estado de México encabeza la lista de solicitudes para tratamiento de la ansiedad, seguido por la Ciudad de México con un 11,72%. Un puesto más abajo se encuentra el Estado de Jalisco con un 6,2%. Guanajuato se sitúa en el cuarto puesto con el 4,99% de solicitudes, seguido muy de cerca por Chihuahua que alcanza el 4,18%.
Uno de los peligros más grandes de sufrir un ataque de ansiedad, o de pánico, es que éste se presenta intempestivamente y puede ocurrirnos en cualquier momento o lugar y sin ningún motivo.
Aunque los científicos que se han encargado de investigar el origen de los ataques de pánico no han llegado a ninguna conclusión sobre éste, tienen la teoría de que, probablemente, puedan deberse a causas hereditarias, es decir, el factor congénito podría ser una causa. Por otro lado, sugieren también que podrían deberse a factores externos, como por ejemplo, la muerte de algún ser querido, o incluso se ha llegado a decir que muchas mujeres que han tenido un bebé, tienden a sufrirlos.
Este padecimiento se presenta cuando las personas se encuentran ya en una edad adulta y aunque nadie está exento de padecerlos, está comprobado que los ataques de pánico se dan en mayor medida en mujeres que en hombres.
Acudir a un psicólogo es fundamental si se cree que, probablemente, se pueda estar sufriendo un “panic attack”, primero, para que pueda ser diagnosticada correctamente esta enfermedad, y luego para recibir el tratamiento necesario para poder controlarla.
